La Corte Penal Internacional advierte sobre represalias hacia el tribunal
La CPI, en el foco por su investigación sobre los ataques de Israel en Gaza, advirtió que las amenazas contra la institución y el personal constituyen un "delito contra la administración de justicia".
La Corte Penal Internacional (CPI), que se encuentra en el centro de la atención por su investigación sobre los ataques israelíes en Gaza, advirtió que las amenazas emitidas contra la institución o su personal pueden constituir un "delito contra la administración de justicia".
La oficina del fiscal de la CPI, Karim Khan, indicó este viernes que son conscientes del "importante interés público" en sus actividades y que su objetivo es "relacionarse de forma constructiva con todas las partes implicadas".
Asimismo, detallaron que la corte protesta porque su "independencia e imparcialidad están comprometidas cuando individuos amenazan con tomar medidas de represalias contra la corte o el personal de la corte".
"Estas amenazas, incluso si luego no se concretan, pueden constituir un delito a la administración de la justicia", enfatizó el comunicado publicado en la red social X.
Por ello, la CPI pidió el fin "inmediato" de los "intentos de obstaculizar, intimidar o influenciar indebidamente a sus responsables".
Investigación sobre genocidio en Gaza
El comunicado no especificó de dónde proceden estas amenazas o si están vinculadas a la investigación sobre el genocidio en Gaza.
Sin embargo, este fue difundido días después de que funcionarios israelíes dijeran que cualquier intento del tribunal de tomar medidas contra Israel sería "escandaloso".
A su vez, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo este miércoles que la CPI estaba "contemplando emitir órdenes de arresto contra altos funcionarios militares y del gobierno israelí como criminales de guerra". "Esto sería un ultraje de proporciones históricas", dijo, alegando que el tribunal estaba "tratando de poner a Israel en el banquillo".
Además, Estados Unidos aseguró el pasado lunes que también se oponía a la investigación de la CPI sobre la conducta de Israel en Gaza.
La CPI es el único tribunal independiente del mundo creado para investigar los delitos más graves cometidos por sospechosos individuales, incluidos genocidio, crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad.