Líbano reporta primer caso de cólera entre desplazamientos y ataque israelí
La OMS encendió las alarmas por el riesgo de transmisión de cólera en Líbano, en medio de desplazamientos masivos y hacinamiento en albergues, mientras Israel sigue bombardeando el país sin descanso.
El Líbano ya confirmó su primer caso de cólera desde que Israel intensificó la ofensiva sobre el país el pasado 23 de septiembre, alertó el Ministerio de Salud libanés este miércoles.
La entidad detalló que el lunes recibió la notificación de una posible infección en la región Akkar, en el norte del país. Una mujer de la localidad de Sammouniye fue hospitalizada con deshidratación grave y diarrea acuosa aguda.
Dos días después, este miércoles, se confirmó el caso y se diagnosticó a la paciente. En consecuencia, el Ministerio de Salud del Líbano informó que está recopilando muestras para detectar posibles infecciones adicionales, especialmente entre quienes estuvieron en contacto cercano con la paciente.
La entidad aseguró que ya investiga si agua contaminada pudo ser la fuente del brote. En esa línea, informó que activará su plan nacional de respuesta al cólera con medidas de contención.
Riesgo “muy alto” de propagación
Por su parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió que el riesgo de propagación de cólera en el Líbano es “muy alto” debido al desplazamiento masivo de la población.
Los ataques israelíes contra el país ya se han extendido por semanas y las personas han sido obligadas a huir de sus hogares. Estos desplazamientos han generado hacinamiento en los refugios, además de preocupaciones sobre la propagación de enfermedades infecciosas.
En una rueda de prensa, el representante de la OMS en el Líbano, Abdul Nasir Abubakar, alertó que la población del país no tiene inmunidad contra la enfermedad desde hace décadas. El país sufrió un leve brote en el año 2022, pero fue en 1993 cuando se consideró erradicada.
El cólera, una enfermedad transmitida por el agua, puede causar diarrea potencialmente mortal, especialmente en niños desnutridos menores de cinco años.
Israel ataca a Cruz Roja y misión de la ONU
Este miércoles, la Cruz Roja Libanesa informó que dos paramédicos resultaron heridos en un ataque que alcanzó la aldea de Jwaya, en el sur del Líbano, mientras llevaban a cabo una misión de rescate en coordinación con la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en el Líbano (FPNUL).
Además, un tanque Merkava israelí disparó contra una torre de vigilancia de los cascos azules de la ONU en Kfar Kela, al sur del Líbano.
La Cruz Roja Libanesa informó que dos paramédicos resultaron heridos en un ataque que alcanzó la aldea de Jwaya, en el sur del Líbano. Foto: AA.
Este ataque, que resultó en la destrucción de dos cámaras y daños a la torre, subraya los crecientes riesgos que enfrentan las fuerzas de la ONU, quienes han estado bajo el constante asedio de Israel. De hecho, Tel Aviv exigió recientemente que los llamados cascos azules abandonaran el Líbano.
En respuesta, el portavoz de la FPNUL, Andrea Tenenti, reiteró que la fuerza de la ONU no abandonará sus posiciones, a pesar de los ataques “directos y deliberados” del Ejército israelí.
En declaraciones a la Agencia Anadolu, Tenenti afirmó que “las fuerzas de paz permanecen en todas las posiciones y la bandera de la ONU sigue ondeando”. Tambiéb agregó que “continuaremos nuestro trabajo para implementar nuestro mandato a pesar de los inmensos desafíos que enfrentamos en este momento”.
Tenenti señaló que, “desde el 8 de octubre, las posiciones de la FPNUL en Ras Naqura, Labbuneh y Ramia han sido atacadas directa y deliberadamente por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI)”.
“Cinco miembros de las fuerzas de paz resultaron heridos en nuestra sede, incluidos dos en el impacto directo en nuestra torre de observación”, explicó Tenenti, quien recalcó que otros 15 miembros de las fuerzas de paz de la ONU “también sufrieron los efectos de un tipo de humo que fue liberado por las FDI en Ramia”.
Los cascos azules españoles de la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en el Líbano (FPNUL) coordinan su patrulla con la Policía Militar Libanesa, en Marjayoun, en el sur del Líbano, el 8 de octubre de 2024. / Foto: AFP
El portavoz destacó que la FPNUL sigue en “contacto constante con las autoridades de ambos lados de la Línea Azul”, la frontera de facto entre Líbano e Israel. El funcionario también enfatizó que “nuestro jefe de misión y comandante de la fuerza ha comunicado directamente a las FDI que los ataques a las posiciones de las Naciones Unidas y a las fuerzas de paz son inaceptables”.
“Hemos rechazazdo formalmente por los recientes incidentes a las FDI mediante una carta”, indicó Tenenti. En cuanto a los motivos, dijo que el Ejército israelí “no nos ha informado por qué están atacando nuestras posiciones, cámaras, iluminación y equipos de comunicaciones”.
Finalmente, Tenenti hizo un llamado al Consejo de Seguridad de la ONU para que “todas las partes respeten la seguridad del personal y las instalaciones de la FPNUL”.
Tel Aviv no cesa en sus ataques en Líbano
Israel continúa intensificando sus ataques en Líbano, extendiendo la destrucción generalizada a diversas áreas del sur del país.
Según el Ministerio de Salud local, al menos 16 personas han perdido la vida y 52 han resultado heridas en estos bombardeos, que han incluido ataques a dos edificios municipales, donde fue asesinado el alcalde de Nabatiyeh, una de las ciudades más importantes del sur.
Israel ha bombardeado el sur de Beirut destruyendo varios edificios
Desde el comienzo de la brutal ofensiva de Tel Aviv contra Gaza tras el ataque de Hamás el 7 de octubre, el grupo libanés Hezbollah ha respondido con enfrentamientos de baja intensidad al norte de Israel, en solidaridad con el movimiento palestino.
Hezbollah ha declarado que estos ataques continuarán hasta que Israel detenga su ofensiva en Gaza, que ha dejado un saldo devastador de más de 42.000 palestinos muertos y más de 99.000 heridos.
Desde el 1 de octubre, Israel escaló su ofensiva, comenzando una invasión terrestre que Hezbollah afirma haber enfrentado en múltiples ocasiones, mientras que los ataques aéreos continúan matando a decenas de personas todos los días.
La agresión de Israel contra Líbano ya deja más de 2.350 muertos y ha desplazado a aproximadamente 1.200.000 personas, muchas de ellas hacia la devastada Siria.