EE.UU. "entiende" preocupaciones de Türkiye, pero seguirá apoyando a PKK
A pesar de considerar al PKK como una organización terrorista, Washington ha legitimado por mucho tiempo la presencia de ese grupo en las fronteras de Türkiye bajo el pretexto de combatir a Daesh.
Estados Unidos ha reiterado que entiende las preocupaciones de seguridad legítimas que tiene Türkiye a lo largo de su frontera con Siria frente a las amenazas de la organización terrorista PKK/YPG, pero no mostró voluntad de abordar el asunto.
"Entendemos que Türkiye tiene preocupaciones legítimas de seguridad a lo largo de esa frontera. Ciudadanos turcos, pueblos turcos, ciudades turcas han sido atacadas por terroristas desde el otro lado de esa frontera", reconoció el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, en conversación con periodistas este martes.
"Tienen absolutamente el derecho legítimo de poder defenderse de los ataques terroristas. Lo entendemos y estamos en conversaciones activas con los turcos sobre cómo enfrentamos eso nosotros y cómo lo enfrentan ellos", agregó Kirby.
Sin embargo, luego enfatizó que la presencia estadounidense en Siria tiene como objetivo evitar que Daesh (al que llaman ISIS) se reagrupe tras la caída del régimen de Bashar al Assad en diciembre, por lo que la asociación de Washington con las fuerzas SDF lideradas por el PKK/YPG continuará con ese fin.
Estados Unidos no quiere que sus “operaciones” relacionadas con “nuestros socios de las SDF” se enfoquen “en otras cosas que no sean la misión de contrarrestar al ISIS", agregó.
Un aliado de la OTAN contra terroristas
A pesar de reconocer al PKK como una organización terrorista, responsable de la muerte de 40.000 personas, Estados Unidos ha legitimado durante mucho tiempo la presencia de este grupo a lo largo de las fronteras de Türkiye bajo el pretexto de combatir a Daesh.
El grupo separatista PKK/YPG ha tratado de aprovecharse del vacío de poder de Siria desde la caída del régimen de Assad para intensificar los esfuerzos por establecer un "corredor terrorista" a lo largo de la frontera con Türkiye.
Ankara sostiene que utilizar un grupo terrorista para luchar contra otro es contraproducente y ha propuesto que Estados Unidos se asocie con Türkiye, que es su aliado en la OTAN, en lugar de con los terroristas para enfrentar a Daesh.