Crimen del padre Marcelo Pérez en México: ¿quién era y cuál fue su legado?
La conmoción se cierne sobre México tras el asesinato del sacerdote indígena Marcelo Pérez, destacado activista contra la violencia en el estado de Chiapas. Hay un sospechoso detenido.
El mismo día en que cientos de personas asistían al funeral del sacerdote indígena Marcelo Pérez, asesinado este domingo en Chiapas, en el sur de México, las autoridades informaron sobre la detención del presunto autor material del crimen.
"Mi reconocimiento a las autoridades de Procuración de Justicia, quienes me han informado que ha sido detenido el autor material de la muerte del padre Marcelo", señaló el gobernador de Chiapas, Rutilio Escandón, en la red social X, antes Twitter.
Pérez, de 51 años y quien contaba con medidas de protección cautelares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), fue asesinado a tiros luego de oficiar una misa en la ciudad de San Cristóbal de las Casas, en un hecho que desató múltiples condenas y conmoción en México. El sacerdote, originario de la etnia maya tzotzil, era conocido por su labor en derechos humanos y había recibido amenazas de muerte previamente.
Su asesinato impactó a cientos de personas en el estado de Chiapas, a la vez que generó el rechazo de la Iglesia católica, la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos y varias organizaciones, que exigieron una investigación de los hechos.
A su vez, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, informó que la Fiscalía General de la República se encargará de las investigaciones relacionadas con el asesinato.
Personas cargan el féretro de Marcelo Pérez, sacerdote asesinado en Chiapas por denunciar el narcotráfico. Foto: Luis Enrique Aguilar. AFP.
¿Quién era Marcelo Pérez?
Conocido como el "padre Marcelo", este sacerdote fue más que un simple párroco: se erigió como un referente en la defensa de los derechos de los pueblos indígenas, la lucha contra el crimen organizado y el activismo por la paz.
Nacido en el municipio de San Andrés Larrainzar, Chiapas, Pérez dedicó más de dos décadas de su vida pastoral al servicio de las comunidades indígenas más vulnerables, convirtiéndose en un defensor de sus derechos.
Su labor en una región montañosa de Chiapas, marcada por la delincuencia y disputas territoriales, le valió el respeto de muchos como mediador en conflictos locales.
A lo largo de los años, Pérez lideró numerosas marchas en contra de la violencia, lo que le significó múltiples amenazas de muerte. A pesar de contar con medidas de protección de la CIDH fue objeto de amenazas debido a sus denuncias sobre el narcotráfico.
Su asesinato ha sido calificado por muchos como una tragedia anunciada, pues defensores de derechos humanos señalaron que no recibió la protección gubernamental necesaria.
Imagen sin fecha del sacerdote Marcelo Pérez, defensor de derechos humanos, asesinado en San Cristóbal de Las Casas. Foto: Luis Enrique Aguilar. AFP.
"Durante años insistimos en que el gobierno mexicano debía atender las amenazas y agresiones en su contra, pero nunca se implementaron medidas para garantizar su vida, seguridad y bienestar", expresó el Centro de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas.
Este organismo también subrayó que su muerte "se produjo en el contexto de una grave escalada de violencia contra la ciudadanía en Chiapas".
La Oficina de Derechos Humanos de la ONU informó que Pérez fue el séptimo activista de derechos humanos asesinado en México en 2024.
Además, el padre Marcelo se suma a la lista de nueve religiosos que han sido asesinados en el país en los últimos cinco años, según cifras de la Iglesia católica. El lunes, la Diócesis de San Cristóbal de las Casas, a la que estaba adscrito Pérez, exigió que cese la "criminalización" de sacerdotes y misioneros.
En una declaración dirigida al gobierno y a la sociedad civil, la diócesis demandó el esclarecimiento del crimen y un alto total a la "violencia desbordada" en Chiapas.
Ese estado, fronterizo con Guatemala, se ha visto sacudido por pugnas entre cárteles del narcotráfico dedicados también a la extorsión y al tráfico de migrantes.
Este martes, la presidenta Sheinbaum aseguró que su gobierno está trabajando con el gobierno local para frenar la escalada violenta.
Imagen sin fecha del sacerdote Marcelo Pérez, defensor de derechos humanos, asesinado en San Cristóbal de Las Casas. Foto: Luis Enrique Aguilar. AFP.
“Una voz profética”
Con tristeza y consternación, pero también con fervientes gritos de "¡viva!" en su honor, cientos de personas se reunieron este lunes para rendir homenaje al sacerdote indígena.
Muchos fieles se acercaron al ataúd para ofrecer oraciones y despedirse. El orador del evento exclamó "¡viva el padre Marcelo!", un llamado que fue acogido con entusiasmo y brazos en alto.
El Consejo Episcopal Latinoamericano envió desde Bogotá una carta en la que expresa su "consternación y dolor" por el asesinato, destacando que el padre Marcelo era "un incansable defensor de la paz y la justicia en su comunidad".
Además, señalaron que este acto de violencia "no solo priva a la comunidad de un pastor comprometido, sino que también silencia una voz profética que ha luchado incansablemente por la paz y la justicia en la región de Chiapas".
Miembros de comunidades indígenas y fieles católicos asisten a una misa multitudinaria durante el velatorio del sacerdote Marcelo Pérez, asesinado en Chiapas. Foto: Luis Enrique Aguilar. AFP.