Adiós a amparo migratorio para 600.000 venezolanos en EE.UU.: ¿qué implica?
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, revocó el Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés) para venezolanos, que les permitía residir y trabajar legalmente en el país
Siguiendo la política drástica que prometió contra la inmigración irregular en Estados Unidos, el Gobierno del presidente Donald Trump anunció la cancelación de un amparo migratorio que protegía a cerca de 600.000 venezolanos de la deportación.
La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, anunció la cancelación del Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés), un programa que les permite a personas de varias naciones –entre las que hasta este miércoles estaba Venezuela– que ya vivan en EE.UU. quedarse allí y trabajar legalmente si sus lugares de origen son considerados inseguros por Washington.
El TPS para los venezolanos había sido extendido por el secretario de Seguridad Nacional de Biden, Alejandro Mayorkas, días antes de que terminara el anterior mandato. Mayorkas decidió prorrogarlo por otros 18 meses, hasta 2026. Sin embargo, Noem dio marcha atrás y canceló la protección migratoria.
El cambio entra en vigencia inmediatamente y forma parte de las acciones que ha tomado Trump para cumplir con la reiterada promesa de acabar con la inmigración irregular y llevar a cabo el mayor esfuerzo de deportación masiva en la historia de Estados Unidos.
"La gente de este país los quiere fuera. Quieren que sus comunidades estén seguras", declaró Noem en una entrevista con Fox News. "Hemos parado esto", y "vamos a seguir el procedimiento y evaluar a todos estos individuos que están en nuestro país", insistió.
Según el Instituto de Investigación Pew, hasta marzo de 2024 en Estados Unidos había 1,2 millones de personas elegibles para el TPS o que se habían beneficiado del programa, siendo los venezolanos el grupo más grande.
Fotografía tomada de la cuenta en X de la portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, de migrantes ingresando a un avión para un vuelo de deportación. / Foto: EFE.
¿Qué implica la medida?
Cancelada la extensión del TPS para venezolanos que había aprobado el Gobierno de Biden hasta octubre de 2026, la protección ahora queda bajos dos designaciones que vencen en plazos diferentes. Una expira en abril y otra en septiembre, lo que deja a los miles de beneficiarios en una situación de incertidumbre.
Si la medida de Trump no se revierte, los venezolanos perderían el derecho a trabajar en EE.UU. y quedarían en riesgo de deportación.
Noem tiene hasta el sábado para establecer las acciones sobre el grupo cuya protección expira en abril y hasta el 12 de julio para aquellos cuya protección finaliza en septiembre. Si no actúa, las protecciones se extenderán automáticamente por otros seis meses.
Las limitaciones en las relaciones diplomáticas entre EE.UU. y Venezuela complican las opciones de deportación.
Las regulaciones federales permiten terminar las extensiones antes de tiempo, aunque esto rara vez se ha hecho. Durante su primer mandato, Trump intentó poner fin a estos amparos, lo que derivó en demandas legales.
La Alianza Nacional TPS, un grupo de defensa de los inmigrantes, anunció este miércoles que está preparada para impugnar esta decisión en los tribunales.
El Congreso creó el TPS en 1990 para evitar deportaciones a países afectados por desastres naturales o conflictos civiles, otorgando a los beneficiarios autorización para trabajar en períodos renovables de hasta 18 meses.
Ahora bien, el TPS otorga un estatus legal temporal, pero no ofrece un camino a la ciudadanía permanente.