China promete "transición fluida" con Estados Unidos, según Xi Jinping
Xi y Biden, que se reunieron por tercera vez en total, advirtieron por separado en los últimos días sobre las aguas turbulentas que se avecinan en un momento de incertidumbre global.
China expresó su disposición a trabajar con la nueva administración de Estados Unidos para asegurar una "transición suave" en sus relaciones bilaterales, aseguró el presidente Xi Jinping durante su última reunión con Joe Biden antes de que Donald Trump retome la Casa Blanca.
En sus comentarios, Xi señaló que China "se esforzará por una transición suave" en su búsqueda de una relación "estable, saludable y sostenible" con Estados Unidos. Las declaraciones se hicieron durante una reunión en Lima, Perú, donde ambos líderes se sentaron para dialogar tras la finalización de la cumbre de dos días del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), en la que ambos participaron.
Este encuentro entre los mandatarios de las dos economías más grandes del mundo se produce en un contexto de creciente incertidumbre política, luego de la victoria electoral de Trump sobre la demócrata Kamala Harris, que ha reavivado los temores de nuevas guerras comerciales y tensiones diplomáticas. Estos temas dominaron la agenda de la cumbre en la capital peruana, donde se discutieron las posibles implicaciones del regreso de Trump al poder.
El regreso de Trump ha generado dudas sobre los avances conseguidos en la relación entre Washington y Pekín, especialmente tras el histórico encuentro entre Xi y Biden en California el año pasado, cuyo propósito fue aliviar las tensiones entre ambos países.
Desde la Casa Blanca, se había señalado que el objetivo principal de la reunión bilateral entre Xi y Biden sería abordar este "delicado período de transición" y asegurarse de que la competencia con China "no se convierta en un conflicto".
Antes de su encuentro privado, Biden y Xi participaron en un "retiro" a puerta cerrada con otros líderes de APEC, incluidos los de países como Canadá, Chile, Singapur, Australia, Malasia y Japón. Rusia estuvo representada por un viceprimer ministro.
Xi también destacó en sus comentarios que China está "lista para trabajar con la nueva administración estadounidense para mantener la comunicación, ampliar la cooperación y gestionar las diferencias".
Relaciones comerciales entre Estados Unidos y China, estrategia de cooperación. Banderas de Estados Unidos, Estados Unidos y China en un tablero de ajedrez. Getty Images
"Cambio político significativo"
Xi y Biden, quienes se reunieron por tercera vez en total, han advertido por separado en los últimos días sobre las turbulencias que se avecinan en un contexto de incertidumbre global.
El presidente chino reiteró el sábado sus preocupaciones sobre el creciente "proteccionismo" y urgió a los países de APEC a "unirse y cooperar".
Por su parte, Biden dijo el viernes que el mundo ha "llegado a un momento de cambio político significativo".
Mientras tanto, Donald Trump ha adoptado una postura confrontacional hacia Pekín, amenazando con imponer aranceles de hasta un 60% a las importaciones de productos chinos para equilibrar lo que considera una disparidad comercial. Además, ha nombrado a dos figuras clave del ala más dura contra China, incluyendo a Marco Rubio como su próximo secretario de Estado.
En medio de este panorama, Biden, que busca proteger su legado de política exterior, se reunió el viernes con los líderes de Japón y Corea del Sur, aliados estratégicos de Estados Unidos en Asia. El mandatario estadounidense subrayó que los lazos sólidos entre los tres países son esenciales para "contrarrestar la peligrosa y desestabilizadora cooperación de Corea del Norte con Rusia", especialmente mientras Pyongyang envía tropas para luchar en Ucrania.
Alianzas en riesgo
El regreso de las políticas "America First" de Donald Trump amenaza las alianzas que Joe Biden ha trabajado para fortalecer en temas clave, desde las guerras en Ucrania y en Oriente Medio hasta la crisis climática y el comercio.
Durante su primer mandato, Trump amenazó con recortar los compromisos de defensa de Estados Unidos con sus aliados asiáticos y europeos si no asumían una mayor parte de la carga financiera por su protección.
Economistas han advertido que los aranceles punitivos de Trump no solo afectarían la economía china, sino también la de Estados Unidos y sus socios comerciales, lo que podría desestabilizar aún más la situación económica global.
Además, tales medidas podrían poner en peligro la estabilidad geopolítica. China sigue ampliando su capacidad militar y aumentando la presión sobre Taiwán, al que considera parte de su territorio.
El asesor de Seguridad Nacional de EE. UU., Jake Sullivan, indicó que Xi y Biden también discutirán sobre Taiwán y las tensiones en el Mar de China Meridional, donde Pekín reclama amplias áreas marítimas.
La incertidumbre sobre las posibles decisiones de Trump sigue pesando sobre la agenda diplomática internacional, tanto en las conversaciones sobre el cambio climático que se llevan a cabo en Azerbaiyán como en la próxima cumbre del G20 en Río de Janeiro, a la que asistirán tanto Biden como Xi.