De BlackRock al gobierno: qué implicaría que Merz sea canciller de Alemania
Si Merz se convierte en canciller, será el primer líder de gobierno con una trayectoria corporativa que incluye un puesto clave en la empresa BlackRock. ¿Qué implica para el futuro de Alemania?

Friedrich Merz, de la Unión Cristianodemócrata (CDU), durante un acto electoral en Berlín, el 23 de febrero de 2025. / Foto: EFE.
*Este artículo está basado en la investigación de Werner Rügemer, autor del libro “BlackRock in Germany”.
Las elecciones en Alemania dieron la victoria a la Unión Cristianodemócrata Alemana (CDU). Si, como todo indica, Friedrich Merz se convierte en el próximo canciller, será el primero con una trayectoria corporativa que incluye un puesto clave en BlackRock, marcando un posible punto de inflexión en la política alemana al estrechar su vínculo con el poder financiero.
Merz trabajó en BlackRock entre 2016 y 2020, no solo como intermediario, sino participando en la toma de decisiones clave. Bajo su supervisión, la firma se convirtió en accionista de importantes empresas alemanas, consolidando su influencia en Alemania.
De hecho, su libro “Atrévete a ser más capitalista” parece anticipar el rumbo que posiblemente tomará su gobierno, con tendencia a la privatización, la desregulación y la alineación de las políticas gubernamentales con los intereses corporativos.
Cabe destacar que, durante su campaña, Merz utilizó el lema "Por una Alemania de la que podamos estar orgullosos nuevamente", una consigna que recuerda al Make America Great Again del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. No obstante, en este caso tiene un enfoque en la liberalización económica y en el camino hacia una Alemania privatizada.
Trayectoria entre las corporaciones y la política
La carrera de Merz no se limita a BlackRock, donde se unió hace nueve años. Antes, en 2014, fue consejero senior en Mayer Brown, un influyente bufete de abogados y firma de lobby con sede en Estados Unidos, donde facilitó inversiones estadounidenses en empresas alemanas.
También ocupó cargos en los consejos de supervisión y administración de corporaciones alemanas como HSBC Trinkaus & Burkhardt y AXA Konzern AG.
En política, Merz fue miembro del Bundestag entre 1994 y 2009, llegando a ser presidente del grupo parlamentario CDU/CSU en el año 2000.
Sin embargo, tras conflictos internos con la excanciller Angela Merkel, se retiró gradualmente de la política en 2009 y regresó al sector privado. Regresó en 2021, tras el retiro de Merkel, para asumir el liderazgo de la CDU.

Cartel en la fachada de la oficina de la empresa financiera Blackrock en la zona de Silicon Beach en Los Ángeles, California / Foto: BlackRock.
La influencia de BlackRock
Como directivo de BlackRock, supervisó la expansión de la compañía en Alemania y facilitó reuniones entre el CEO, Laurence Fink, y altos funcionarios del gobierno alemán. Por eso, si Merz se convierte en canciller, Alemania sería el primer país gobernado por un exdirectivo de BlackRock, lo que plantea interrogantes sobre la influencia de las finanzas globales en la política nacional.
Ahora bien, BlackRock, que cuenta con activos por 11 billones de dólares, ya influye en la política financiera de Alemania y Europa. En los últimos años, ha evitado regulaciones mientras ampliaba su presencia en instituciones financieras, utilizaba paraísos fiscales y ofrecía asesoramiento a bancos centrales y gobiernos.
Desregulación y privatización
Más allá de su historial en el sector privado, Merz ha defendido durante años políticas favorables a la desregulación, la reducción de impuestos corporativos y la privatización de servicios públicos.
Ha respaldado la venta de empresas alemanas a inversores estadounidenses y ha promovido esquemas de pensiones privadas –lo que beneficiaría directamente a firmas como BlackRock–. También se ha opuesto al aumento del salario mínimo y a regulaciones de protección laboral.
Otro punto a destacar es que históricamente Merz ha estado alineado con las estrategnas económicas y geopolíticas de Estados Unidos. Por eso, ahora sus políticas podrías orientarse a fortalecer el rol de Alemania en la OTAN con un incremento en el gasto militar.
También se podría anticipar el mantenimiento de políticas económicas lideradas por EE.UU., como la dependencia del gas licuado estadounidense, así como impulsar regulaciones financieras favorables a Wall Street.
La victoria del CDU y la llegada de Merz como líder del gobierno es significativa para Alemania: refleja la creciente intersección entre el sector privado y la política, abriendo el debate sobre la influencia de los intereses corporativos en la formulación de políticas públicas.