Netanyahu rechaza negociar tregua con Hezbollah y sigue atacando Líbano
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, afirmó que no aceptará un alto el fuego con Hezbollah, a pesar de que el grupo libanés se muestra dispuesto a negociar un alto el fuego.
El conflicto entre Israel y Hezbollah sigue escalando. Tel Aviv continúa bombardeando el Líbano y ha dejado claro que no habrá alto el fuego, pese a que Hezbollah se muestra dispuesto a negociar, afirmando que esta es la única manera de detener los enfrentamientos.
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, dijo este martes que se opone a “un alto el fuego unilateral en el Líbano” así como a cualquier acuerdo “que permita a Hezbollah rearmarse”.
En esta línea, enfatizó que "Israel no aceptará ningún acuerdo que no garantice” que los ciudadanos israelíes “regresen a sus hogares de forma segura" en la frontera norte, según un comunicado de la oficina del primer ministro.
La negativa de Tel Aviv a negociar una tregua contrasta con las declaraciones del vicesecretario general de Hezbollah, Naim Qassem, que asegura que una tregua “es la única solución para poner fin a sus enfrentamientos”.
"La solución es un alto el fuego, tras el cual los colonos podrán regresar al norte (de Israel)", señaló Qassem este martes. Esta no es la primera vez que Hezbollah asegura que ve con buenos ojos la posibilidad de un alto el fuego: el grupo había aceptado una tregua poco antes de que el ejército israelí matara a fines de septiembre a su líder Hassan Nasrallah e invadiera el Líbano, según informó el Gobierno de este país.
Por otro lado, en su discurso, Qassem aseveró que el grupo tiene “derecho a atacar cualquier punto en Israel después de sus violaciones en el Líbano” y advirtió que "el lanzamiento de cohetes continuará".
El grupo indicó este martes que disparó misiles contra "tres topadoras y un tanque" del ejército israelí, cerca de una aldea del sur de Líbano. También confirmó que lanzó cohetes contra varias regiones del norte de Israel, incluyendo Haifa y Safed, y derribó dos drones israelíes. Por su parte, el ejército israelí reportó la mañana del miércoles que 50 proyectiles fueron lanzados hacia Alta Galilea.
"Mientras tanto, Tel Aviv busca una ocupación expansionista que no se limita a la región árabe, sino a toda la esfera islámica, con la intención de controlar el mundo desde su posición en la región", agregó Qassem. Líbano, según él, "es parte de este proyecto expansionista israelí".
Israel lanza bombas de racimo en el sur del Líbano
Por otro lado, Hezbollah acusó a Israel de atacar áreas en el sur de Líbano con bombas de racimo, prohibidas a nivel internacional. Hizo un llamado a las organizaciones internacionales de derechos humanos y humanitarias para condenar este "crimen atroz".
"Hoy, el enemigo israelí lanzó cohetes llenos de bombas de racimo, prohibidas internacionalmente", en las regiones de la provincia de Nabatieh, en el sur de Líbano, dijo Hezbollah en un comunicado.
Según los Convenios de Ginebra, el uso de este tipo de bombas está prohibido, ya que representan una amenaza para la salud y la vida de los civiles.
Human Rights Watch (HRW) advierte que estas bombas causan daños tanto inmediatos como a largo plazo, dejando tras de sí restos sin explotar que actúan como minas terrestres durante años. La organización ha denunciado previamente el uso de otras armas prohibidas por parte de Israel, como el fósforo blanco.
Israel destruyó partes de Beirut en ataques aéreos en las últimas semanas, expandiendo su camino de devastación por toda la región. (AP)
Ataques en todo el Líbano
Desde el 23 de septiembre, Israel ha llevado a cabo una gran campaña aérea en el Líbano, supuestamente dirigida contra objetivos de Hezbollah. Esta ofensiva ha causado la muerte de más de 1.500 personas y ha desplazado a más de un millón.
Este miércoles por la mañana, el ejército israelí emitió una orden de evacuación para el sur de Beirut. Menos de una hora después, aviones de combate lanzaron tres ataques aéreos en esta zona, incluido un ataque aéreo en el barrio de Haret Hreik y otro en un edificio cerca de una escuela, reportó la Agencia Nacional de Noticias oficial libanesa.
Mientras tanto, aviones de combate israelíes llevaron a cabo 10 ataques aéreos en la ciudad de Nabatieh, una importante ciudad del sur del país, causando la muerte de al menos 5 personas. El alcalde de la ciudad, Ahmad Kahil, figura entre los fallecidos, según indicó la gobernadora Howaida Turk.
Asimismo, a última hora del martes, Tel Aviv llevó a cabo una serie de ataques aéreos contra varias ciudades y regiones del sur y este del Líbano, entre ellos los pueblos de Qana y Tiro, matando al menos a 23 personas e hiriendo a otras 31.
El intercambio de fuego en la frontera comenzó el 7 de octubre cuando inició la agresión de Israel contra Gaza, que ya ha matado a casi 42.400 personas. Desde entonces, el número de muertos en el Líbano ha aumentado a 2.350, según informó el martes el Ministerio de Salud de este país.