Ataques de Israel a Siria: ¿buscan descarrilar el futuro del país?
Mientras Siria lucha por reconstruirse tras años de conflicto, la continua agresión militar de Israel genera preocupación sobre la viabilidad a largo plazo de una nación devastada por la guerra.
A pesar de la caída del régimen de Bashar al-Assad hace apenas días, las tensiones en Siria no dan señales de disminuir. En una flagrante violación al Acuerdo de Separación de Fuerzas de 1974, tropas de Israel entraron en territorio sirio, intensificando aún más el conflicto entre los dos estados.
La presencia militar israelí se extiende más allá de la zona de amortiguación designada por la ONU que separa el territorio sirio de los Altos del Golán ocupados. Las fuerzas de Tel Aviv han ocupado zonas estratégicas y avanzado hasta situarse a sólo 25 kilómetros de Damasco, según informó la agencia de noticias Reuters. Por si fuera poco, Israel sigue bombardeando la infraestructura militar siria, lo que desestabiliza aún más la región.
“Israel ha ocupado muchas zonas. La mayoría son colinas estratégicas en Quneitra, además del monte Hermón”, describe Omar Alhariri, periodista sirio radicado en Daraa, quien durante muchos años ha seguido de cerca los cambios vertiginosos al sur del país.
El monte Hermón, dentro de la zona de amortiguación de la ONU, es un punto estratégico desde el cual se puede observar, desde lejos, la capital de Damasco. Quneitra, en el sudoeste de Siria y cerca de los Altos de Golán, es por su ubicación otra región importante, hoy bajo control israelí. Si bien Alhariri no cree que Israel avance hacia las grandes ciudades, teme que Tel Aviv “conserve estos sitios en el futuro, específicamente el monte Hermón, por su localización estratégica”.
“Las ciudades sirias de Quneitra también estarán bajo la ocupación permanente de Israel, especialmente la ciudad drusa de Hadar”, explica el periodista sirio a TRT World. Aunque fuentes sirias afirman que Israel podría haber llegado hasta Qatana, a poca distancia del Aeropuerto Internacional de Damasco, Alhariri insiste en que esa versión aún no ha sido confirmada.
Israel explota el vacío de autoridad
El doctor Oytun Orhan, coordinador de estudios del Levante en el Centro para Estudios del Oriente Medio (ORSAM), un centro de investigación turco situado en Ankara, considera que la ocupación israelí en Siria es una maniobra oportunista para explotar el vacío de autoridad tras la devastadora guerra civil. Al ocupar ese vacío de poder, Israel se posiciona para ganar influencia frente a potenciales enemigos en Siria y en toda la región, a la vez que aísla aún más al grupo libanés Hezbollah de sus aliados iraníes.
“El desmantelamiento de la presencia iraní en Siria con la caída del régimen de Assad es una ganancia significativa para Israel. También la retirada de las milicias chiítas de Siria es otro logro importante”, explica Orhan a TRT World. “Actualmente, lo que Israel busca en Siria es que las áreas bajo control de grupos antes vinculados con Irán, sean imposibles de recuperar para Teherán”, añadió.
Los ataques aéreos israelíes tienen como objetivo más de 250 sitios en toda Siria. (AA)
Orhan sugiere que, al destruir las capacidades del ejército del régimen sirio desde sus fuerzas navales y aéreas hasta sus instalaciones estratégicas, Israel pretende convertir al país devastado por la guerra en un estado incapaz de representar amenaza alguna para Tel Aviv, al menos durante las próximas tres décadas.
Alhariri comparte una perspectiva similar. Para él, los ataques de Israel contra objetivos militares sirios persistirán hasta que Tel Aviv destruya todas las capacidades de defensa de este país. “Están destruyendo todo lo que tenía el ejército sirio… depósitos de armas, emplazamientos, radares, literalmente todo”, revela. “Cuando terminen, Siria no tendrá ejército”, completó.
El ministro de Defensa de Israel, Israel Katz, prometió que Tel Aviv “destruirá armas estratégicas pesadas en toda Siria, incluidos misiles tierra-aire, sistemas de defensa aérea, misiles tierra-tierra, misiles de crucero, cohetes de largo alcance y misiles costeros”.
Según fuentes de seguridad regionales, hasta la fecha, Israel ha llevado a cabo más de 200 ataques contra objetivos militares sirios, dejando en ruinas gran parte de la infraestructura militar del país. Este miércoles 11 de diciembre, atacó bases aéreas militares sirias, destruyó docenas de helicópteros y aviones, e instalaciones de la Guardia Republicana en Damasco y sus alrededores.
Relaciones envenenadas
La ocupación israelí del territorio sirio ha provocado una dura condena de Ankara, Riad, El Cairo y otros estados árabes, así como de las Naciones Unidas.
“En este momento delicado en el que ha surgido la posibilidad de lograr la paz y la estabilidad que el pueblo sirio ha anhelado durante muchos años, Israel muestra una vez más su mentalidad de ocupación”, expresó un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores de Türkiye.
Arabia Saudita se ha hecho eco de preocupaciones similares. Calificó la ocupación israelí de la zona de amortiguación como un intento deliberado de “sabotear las posibilidades de Siria de recuperar la seguridad, la estabilidad y la integridad territorial”.
“Israel está sembrando nuevos problemas al invadir Siria”, retomó el doctor Orhan, quien evalúa que Tel Aviv buscará apoyo del próximo gobierno de Donald Trump en Estados Unidos para legitimar sus nuevas ocupaciones en Siria. “Las nuevas ocupaciones de Israel en Siria serán una causa de conflicto entre Tel Aviv y Damasco en el futuro”, agregó.
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, que acaba de comparecer ante el tribunal acusado corrupción, utilizó un lenguaje ambiguo para describir la ocupación de su ejército en Siria. Dijo que se trata de "una posición defensiva temporal hasta que se encuentre un acuerdo adecuado". Tel Aviv, de hecho, niega que sus fuerzas se hayan movido más allá de la zona de amortiguación desmilitarizada.
Curiosamente, mientras la declaración en inglés de Netanyahu incluía la palabra "temporal", que podría estar destinada a calmar a la audiencia occidental, su declaración en hebreo omitió ese término, insinuando una ocupación potencialmente permanente.
El Departamento de Estado de EE.UU. emitió una declaración de apoyo a la invasión israelí de Siria. "El ejército sirio abandonó sus posiciones en torno a la zona de amortiguación negociada entre Israel y Siria, lo que potencialmente crea un vacío que podría haber sido llenado por organizaciones terroristas que amenazarían al estado de Israel", dijo Matthew Miller, el portavoz del Departamento de Estado.
Esta declaración sugiere que EE.UU. y Occidente estarían preparados para aceptar otro hecho consumado de Israel en Siria en nombre de la defensa de su seguridad nacional. Según el Washington Post, Israel informó a Estados Unidos de su reciente ocupación del territorio sirio.
Orhan señala que el actual liderazgo en Damasco, formado por una coalición de actores no estatales, tiene dificultades, tras la guerra civil, para consolidar el control sobre Siria. Con una capacidad militar limitada, Damasco no pudo defenderse de los ataques aéreos israelíes ni siquiera durante el régimen de Assad. Y ahora es aún menos capaz de hacerlo.