¿Está “de moda” el español? Crece el interés por el idioma en Oriente Medio
Impulsados por las oportunidades en turismo y negocios, muchos jóvenes en Oriente Medio eligen estudiar español. Además, el idioma ganó popularidad gracias al interés por la cultura, música y deporte.
“Me interesan tanto el español como la cultura de los países que lo hablan. Creo que aprender un idioma te hace consciente de la cultura y viceversa”, cuenta Zineb, una joven marroquí que estudia español desde su primer año en la universidad.
El idioma ha tenido un crecimiento robusto en Oriente Medio durante la última década, aunque no todos comparten la motivación de Zineb: en general, lo estudian con el fin de ampliar sus oportunidades laborales.
El mayor aumento de estudiantes de español en la región lo tuvieron Egipto y Jordania. Ambos países cuentan con presencia del Instituto Cervantes, dependiente del Ministerio de Asuntos Exteriores de España, que también tiene centros en Líbano, Turquía, Marruecos, Argelia y Túnez, y ofrece amparo académico a institutos del Golfo Arábigo. Además, numerosas universidades en la zona ofrecen especializaciones en el idioma.
“Comencé a aprender español porque es una de las lenguas más habladas y sé que me será útil en el mundo de los negocios. Su fonética siempre me pareció muy agradable y me parece más fácil que el árabe y el francés”, expresó Şevval. Oriunda de la ciudad turca de Batman, sus primeros acercamientos a este idioma fueron a los 17 años con clases en líena, videos interactivos y aplicaciones.
Además, le resultó útil practicar la pronunciación con canciones y se enamoró de los ritmos latinos. Y no es la única: la música en español ha tenido una rápida expansión en Oriente Medio y actualmente no es inusual encontrar allí jóvenes escuchando Daddy Yankee o Luis Fonsi, aunque pocas veces conozcan el significado de sus letras.
Este interés por el idioma a través de la música es similar a lo que ocurrió con el éxito de series españolas como ‘La casa de papel’, que hizo que muchos televidentes aprendieran frases por fonética y mediante aplicaciones.
Otro fenómeno interesante se produjo el pasado año durante el Mundial de Fútbol: a medida que el equipo de Lionel Messi se acercaba a la final de la competencia, muchas personas se interesaron por la cultura latinoamericana y argentina y, en consecuencia, por el idioma español. En las calles de Qatar, infinidad de aficionados entonaban canciones en este idioma y desplegaban sus habilidades lingüísticas al conocer a un hispanohablante.
Sin embargo, en general, su conocimiento iba más allá de saludos, presentaciones o frases sencillas, como “Yo amo a Messi”.
Especialistas y profesores de español de la región coinciden en que quizás este interés puede haberse trasladado a aplicaciones móviles como Duolingo, sin embargo, no parece haber llegado al ámbito académico.
El español en el Golfo Arábigo
Javier Sánchez Mesas, profesor de español en la Universidad de Qatar, advierte que en los últimos años hubo un crecimiento en la cantidad de estudiantes de español en Doha y en el Golfo, pero que actualmente no es tan notorio.
“Hace dos años te hubiera dicho algo diferente, pero ahora no veo que el crecimiento sea tan alto. Por eso, el Instituto Cervantes no está apostando por el Golfo, porque no hay un mercado tan fuerte como en Jordania o Egipto, países en los que realmente saber español te va a abrir más puertas para carreras como turismo o negocios”, analizó Sánchez Mesas, que tiene a su cargo dos cursos en la universidad y que ha enseñado hasta cincuenta estudiantes por semestre.
Asimismo, explicó que “los deportes sí fomentan el interés por aprender un idioma extranjero, pero en este caso no parece que haya subido la demanda del español tras el Mundial. Uno podría creer que un evento fascinante como ese llevaría a querer aprender un idioma, pero quienes nos dedicamos al mundo de las lenguas extranjeras sabemos que no es exactamente así”.
Egipto y Jordania, los países con más estudiantes de español
En Egipto también se puede comprobar un amplio interés por las culturas de los hispanohablantes y por el fútbol, puntualmente por la Liga Española, aunque esto tampoco parece trasladarse directamente al ámbito académico.
“Aquí la principal motivación de los estudiantes de entre 18 y 25 años es trabajar con turistas de España y América Latina que llegan con frecuencia para visitar las pirámides y los principales centros históricos”, puntualizó un argentino que da clases de español en El Cairo y que prefiere no revelar su nombre.
Además, señaló que el objetivo de muchos de sus alumnos es aprovechar las oportunidades laborales en empresas extranjeras de atención al cliente, como call centers, que ofrecen servicios para España desde el país africano.
Por eso, además de estudiar en las tantas universidades y centros académicos que funcionan en el país, muchos recurren a lecciones extracurriculares para practicar sus habilidades de conversación.
Ante la pregunta sobre el interés que se generó a partir del Mundial, el profesor remarcó que hay que tener en cuenta que el habla del país ganador, Argentina, es diferente al que se suele estudiar en los centros y que, además, Messi tiene un acento particular que dificulta que los estudiantes de nivel básico lo comprendan.
En este punto, coinciden tres hermanos jordanos que decidieron estudiar el idioma por su amor hacia el fútbol, pero se llevaron sorpresas respecto a los acentos.
Los jóvenes, de entre 12 y 19 años, comenzaron a estudiar con una profesora argentina y con mucha ilusión, pero se decepcionaron al ver que el español tenía algo en común con su lengua nativa, el árabe: no solo cada país tiene su versión, sino en que cada uno de ellos hay además varios acentos.
Entonces, si lograban en el futuro entender a los futbolistas que admiran, probablemente sería difícil comprender el idioma si viajaban a España, por lo que deberían “estudiar el doble”.
Un idioma de oportunidades
Zineb, la joven marroquí entusiasmada por acercarse a la lengua y la cultura, sueña con “descubrir el mundo” al finalizar sus estudios.
“Me encanta el idioma y siempre quise estudiarlo. Espero tener una oportunidad de obtener una maestría en el extranjero o de trabajar en un país de habla hispana”, manifestó.
Debido a la proximidad geográfica y la historia compartida, la estudiante enfatizó que el español siempre ha sido popular en su país, sin embargo, siente que se ha expandido en Oriente Medio en los últimos tiempos.
Asimismo, afirmó que el español no le parece especialmente complejo: “Creo que tiene mucho en común con el francés y el inglés, y también con el árabe. Creo que eso fue lo que me hizo estar más decidida a aprenderlo. Sí debo decir que encuentro difícil la gramática, que requiere mucho esfuerzo y práctica”.
Por su parte, para Aysha, estudiante de Ciencias de la Computación oriunda de Libia, el interés comenzó desde pequeña: “Siempre estuve interesada en aprender español y traté de empezar incluso antes de la universidad, con internet y apps. Uno de mis objetivos entonces era estudiar en España. Aunque ahora esto cambió y mi plan es continuar mis estudios en Estados Unidos, la realidad es que saber español también será muy útil allí, porque es uno de los idiomas más hablados”.
Motivada, tomó todos los niveles de español disponibles en la Universidad de Qatar, donde cursa sus estudios, incluso aunque no estuvieran específicamente relacionados con su carrera. Ahora, continúa estudiando con un tutor y también practica mediante aplicaciones.
“Quiero descubrir las culturas de todos los países hispanohablantes. No puedo esperar a visitarlos y saber más sobre cada uno. Conocer sus culturas, sobre todo la de España, me ayudará a entender más sobre el lenguaje y cómo evolucionó”, concluyó Aysha.