El nuevo gobierno de Siria condena mortal ataque israelí en su territorio
Las autoridades de la nueva administración en Siria denunciaron las incursiones de Israel en el país, y condenaron el ataque en el sur que dejó al menos tres muertos y varios heridos.

Vehículos blindados de las fuerzas militares israelíes bloquean el paso en una calle que conduce a la localidad de Quneitra, Siria, el 5 de enero de 2025. Foto: AP
Funcionarios del nuevo gobierno de Siria endurecieron su tono contra las incursiones de Israel en su territorio, después de que un ataque de Tel Aviv mató a tres personas e hirió a otras cinco en el sur del país.
“Israel avanzó en la zona desmilitarizada bajo el pretexto de la presencia de milicias iraníes, pero esta excusa ya no se sostiene después de que Damasco fue liberada”, afirmó Ahmad al-Sharaa, líder de la nueva administración siria, en una conferencia de prensa en la capital.
Este miércoles, Israel lanzó un ataque contra la aldea de Ghadir al-Bustan, en la provincia de Quneitra, que mató a tres personas e hirió a varias más, según residentes locales y el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos. Desde la caída Bashar al Assad, Israel ha perpetrado cientos de ataques aéreos contra activos del derrocado régimen, incluyendo aviones, tanques y misiles.
Durante décadas, Israel respetó hasta cierto punto el Acuerdo Fronterizo de Siria de 1974, que se logró con el ahora extinto régimen del partido Baaz y que estableció una zona desmilitarizada patrullada por la ONU.
Sin embargo, tras la caída del régimen de Assad el 8 de diciembre, las fuerzas israelíes pasaron la frontera e ingresaron a la zona de amortiguamiento, argumentando que supuestamente se trataba de un movimiento para garantizar su seguridad. Sin embargo, esta acción generó críticas y protestas de los residentes locales y de varios países árabes.
Al-Sharaa, quien dio la conferencia de prensa junto al ministro de Relaciones Exteriores de Qatar, dijo que Siria está lista para recibir fuerzas internacionales en la zona desmilitarizada. En ese sentido, destacó el “papel central” de Qatar al crear presión internacional sobre Israel para que se retire de la zona de amortiguación.
Mohammed bin Abdulrahman bin Jassim Al Thani, primer ministro y ministro de Relaciones Exteriores de Qatar, condenó la ocupación israelí de la zona desmilitarizada y dijo que sus fuerzas “deben retirarse inmediatamente”.
Violación de soberanía territorial
El 17 de diciembre, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, ordenó a las tropas israelíes a establecer el control territorial sobre varias áreas sirias, y permanecer allí hasta que se estableciera un nuevo acuerdo que garantizara la seguridad de su país. Las fuerzas de Tel Aviv también han realizado incursiones en áreas fuera de la zona desmilitarizada, lo que ha generado protestas.
“Estas áreas pertenecen al pueblo sirio, no al régimen, y debemos defender nuestra patria. Israel debe respetar la soberanía de Siria tal como buscan seguridad para sus propias fronteras y hogares”, dijo el ministro de Relaciones Exteriores de Siria, Asaad al-Shibani, en una entrevista con TRT este jueves.
El funcionario también instó a la comunidad internacional a presionar a Tel Aviv para que se retire de las áreas invadidas y pidió respeto por la soberanía siria. “Todos deben respetar a los demás si quieren garantizar su propia seguridad”, sostuvo Shibani.
Las víctimas del reciente ataque israelí
Entre los muertos que dejó el ataque israelí de este miércoles se encontraba un funcionario municipal y personal de seguridad vinculado a Hayat Tahrir al-Sham (HTS), el grupo que lideró la operación relámpago que derrocó a Assad.
Las fuerzas israelíes señalaron que los ataques estaban dirigidos a vehículos que transportaban armas.
Nizar Mchel, un profesor de Ghadir al-Bustan, relató a la agencia AP que las fuerzas militares y de seguridad del nuevo gobierno estaban realizando operaciones para confiscar armas no autorizadas.
El profesor añadió que los drones israelíes atacaron un convoy de vehículos militares involucrados en la operación, mientras se dirigían al norte del poblado.
En el funeral de Abdo Ali Kouma, un funcionario local que murió en el ataque, decenas de dolientes llevaron su ataúd de madera al lugar de entierro, rezaron por él y lo sepultaron.
“Estaba almorzando con amigos, incluido Kouma, antes de que se fuera a su casa”, comentó el primo de Kouma, Abed al-Rahman al-Bustani, a AP. Minutos después, relató Bustani, escuchó drones en el cielo y sintió el ataque. “El cohete cayó entre nuestras casas, a sólo 10 metros de distancia”.
También dijo que al menos tres personas más resultaron heridas en el ataque. Un periodista también de AP visitó a uno de los miembros heridos de las fuerzas de seguridad en un hospital local.
“Nuestra situación no es buena. Exigimos que Israel se vaya. Han destruido nuestras casas, los drones están constantemente sobre nosotros, y no nos atrevemos a salir de nuestras casas”, señaló Bustani. “Vivimos a 10 kilómetros de ellos. No hemos cruzado sus fronteras ni les hemos causado ningún daño, pero ellos continúan irrumpiendo en todas nuestras localidades”.